Vale, uno de los principales productores de mineral de hierro a nivel global, formalizó un acuerdo con Caterpillar y su distribuidor en Brasil, Sotreq, para ampliar de manera significativa su flota de camiones autónomos en el Sistema Norte del estado de Pará, una de las zonas más relevantes en la cadena de suministro de mineral de hierro en el mundo. La firma del convenio establece la incorporación progresiva de 90 unidades nuevas para el año 2028, fortaleciendo la automatización operativa en las minas de Serra Norte y Serra Sul.
Actualmente, la empresa opera 15 camiones autónomos en Carajás. Con la implementación de este acuerdo, esa cifra se multiplicará por seis, convirtiendo a las operaciones del Sistema Norte en un referente regional en tecnología minera aplicada al transporte. Los vehículos incorporan el sistema Cat® MineStar™ Command for Hauling, desarrollado por Caterpillar, que permite operar los camiones sin conductor a través de una red de control remoto, sensores, radares y algoritmos de navegación avanzados.
La apuesta por sistemas autónomos en el transporte de mineral responde a una estrategia de Vale para reducir la exposición del personal a zonas de riesgo, aumentar la seguridad operativa, mejorar la eficiencia del proceso y reducir el impacto ambiental asociado al consumo de combustible. La propia empresa ha documentado reducciones de hasta 7.5 % en consumo de diésel y mejoras de hasta 15 % en eficiencia productiva desde que comenzó a implementar este tipo de equipos en 2019.
Este nuevo paquete de camiones autónomos incluye modelos con capacidad de carga de hasta 400 toneladas, una mejora frente a los equipos actuales de 320 toneladas. Esta evolución técnica refuerza la capacidad logística de Vale en una zona donde la demanda global de mineral de hierro continúa creciendo, particularmente en mercados asiáticos como China e India.
El acuerdo no solo abarca la provisión de vehículos, sino también una estrategia de soporte técnico, logístico y de capacitación conjunta. Caterpillar será responsable del suministro tecnológico, mientras que Sotreq asumirá la asistencia operativa en campo, incluyendo entrenamiento y mantenimiento. Hasta el momento, más de 260 trabajadores han sido capacitados en funciones específicas para operar y dar soporte a esta tecnología, como analistas de datos, programadores de ruta, operadores remotos y técnicos de mantenimiento.
La decisión de Vale se inscribe dentro de una tendencia global de digitalización y automatización en la minería. Empresas líderes en el sector están acelerando la adopción de tecnologías que permiten operar con mayor previsibilidad, reducir costos operativos y cumplir con objetivos ambientales más estrictos. En Brasil, la automatización de camiones en operaciones a cielo abierto sigue siendo incipiente, por lo que este paso representa un avance estratégico tanto para la competitividad de Vale como para el posicionamiento del país como polo de innovación minera.
Además del impacto en seguridad y productividad, la expansión de la flota autónoma se alinea con los compromisos ambientales de la compañía. Vale ha reiterado su objetivo de alcanzar la neutralidad en emisiones de carbono de alcance 1 y 2 para 2050, y la eficiencia en el uso de combustible es un componente central de esa meta. El despliegue de tecnologías autónomas contribuye a la optimización del consumo energético y al monitoreo preciso de las operaciones, permitiendo tomar decisiones más informadas en tiempo real.
El Sistema Norte, que abarca las minas de Carajás, es una de las regiones más importantes para Vale. La calidad del mineral extraído, con altos contenidos de hierro y bajos niveles de impurezas, lo posiciona como uno de los más competitivos en el mercado global. Invertir en tecnologías de transporte autónomo en esta región significa reforzar la capacidad exportadora de la empresa y asegurar el cumplimiento de contratos internacionales de suministro.
Vale, Caterpillar y Sotreq han destacado que el acuerdo incluye también el desarrollo de soluciones personalizadas para las condiciones específicas del terreno amazónico. El comportamiento de los vehículos autónomos en áreas con alta humedad, pendientes pronunciadas y vegetación densa representa un desafío adicional que está siendo considerado dentro del programa de implementación.
Esta inversión refuerza el papel estratégico de la tecnología en el desarrollo minero sustentable. Al mismo tiempo, abre una oportunidad para redirigir el perfil laboral del sector hacia funciones más técnicas y analíticas. La transición hacia la autonomía requiere nuevos conocimientos, desde programación de sistemas hasta análisis de datos operativos, lo que puede impulsar una nueva generación de empleos cualificados en zonas tradicionalmente mineras.
En paralelo, el impacto social también es considerado. Vale ha enfatizado que el proceso no implica despidos masivos, sino una reconversión laboral con programas de capacitación diseñados para adaptar a los trabajadores a las nuevas tecnologías. Este enfoque busca integrar la innovación con el desarrollo social local, en línea con las políticas de sostenibilidad de la empresa.
La automatización de flotas mineras no es una novedad a nivel global. Compañías como Rio Tinto y BHP ya operan cientos de unidades autónomas en Australia. Sin embargo, en América Latina, el despliegue de esta tecnología aún está en fase de expansión, y Brasil comienza a posicionarse como un referente emergente en esta materia. Vale se ubica a la vanguardia de este proceso, no solo por la escala del proyecto, sino por la integración tecnológica y el compromiso con la seguridad operativa.
Con este paso, la empresa da señales claras de que la innovación tecnológica es un eje central de su estrategia de crecimiento y sostenibilidad. En un contexto internacional marcado por la búsqueda de mayor eficiencia y menor impacto ambiental, la iniciativa en Pará se convierte en un caso a seguir dentro del sector extractivo regional.

